para descargar este audio click aquí
MENSAJE DOMINGO 28/05/2017
Por el Hno. Gabriel.-
Introducción y Contexto
Continuando con nuestro breve estudio de la primera carta a los Corintios, habiendo abordado a razón de dos capítulos por meditación hemos llegado prácticamente al final de la carta, ya que con esta meditación nos proponemos analizar los capítulos 14 y 15 restando solo el capítulo 16 cuyo contenido solo trata sobre algunos planes de Pablo de viajar a Corinto y luego la salutación final.
Analizar esta carta ha sido como leer la constitución de la Iglesia o como se menciono en la meditación anterior leer “un libro de derechos constitucionales para la correcta vida de la Iglesia”
El capitulo 13, el cual es el contexto para adentrarnos en el capítulo 14, muestra que en la Iglesia de Corinto tenia de todo menos amor, cada uno de ellos buscaba alcanzar cierto grado de espiritualidad por medio de los dones pero NO para edificar a la Iglesia sino para tener cierta distinción y jerarquía entre ellos mismos, su intensión detrás de obtener un don de Dios no era para el crecimiento del hermano sino para impresionar a la congragación, por esta razón también disputaban respecto de cual “don” era el mejor dentro de la Iglesia para tener cierta posición y ser admirados (muy similar a lo que sucede hoy en día), a lo que Pablo responde; si buscan esa clase de espiritualidad sepan que por más que alcancen un idioma angelical para predicar en la iglesia, si no tienen amor de nada les aprovechara, un “don sin amor” es como un ruido estorboso que en vez de edificar termina dañando los tímpanos (címbalo que retiñe), como también si hubiese personas que hayan alcanzado un profundo conocimiento de la ciencia de Dios y un discernimiento de todos sus misterios, si no tiene amor todo su conocimiento no tendrá ningún provecho para la Iglesia, un don sin amor no tiene ningún valor.
El amor no es egoísta sino que busca el bien ajeno, por tanto (la sugerencia vital es) antes de buscar un don espiritual de Dios debemos estar llenos de amor, porque de esta forma nos aseguraremos que el don que recibamos de Dios será provechoso para el servicio y edificación de la Iglesia. El amor genuino guiara al cristiano a buscar aquellos dones que aprovechan a toda la iglesia y contribuyen a la edificación de los hermanos tal como el don de enseñanza, exhortación y consolación y no aquellos dones que solo causan impresión como lo es el don de lenguas que al final no edifica a nadie.
El objetivo de un don espiritual
1°Corintios 14:1 Seguid el amor; y procurad los dones espirituales, pero sobre todo que profeticéis. 2 Porque el que habla en lenguas no habla a los hombres, sino a Dios; pues nadie le entiende, aunque por el Espíritu habla misterios. 3 Pero el que profetiza habla a los hombres para edificación, exhortación y consolación. 4 El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica; pero el que profetiza, edifica a la iglesia. 5 Así que, quisiera que todos vosotros hablaseis en lenguas, pero más que profetizaseis; porque mayor es el que profetiza que el que habla en lenguas, a no ser que las interprete para que la iglesia reciba edificación.
Había un interés o pasión desordenada en los corintios por alcanzar aquellos dones que impresionaban a las personas y los distinguía como mas espirituales, pero que al final no edificaba a nadie, y uno de estos dones era el polémico “don de lenguas” que consistía en habar en un idioma desconocido pero sin provecho, sin embargo era algo atractivo para ellos porque de alguna manera equivocada los categorizaba como más espirituales pero sin ningún provecho para la Iglesia. Este deseo desordenado de espiritualidad era consecuencia de su falta de amor, su interés por un don espiritual era puramente egoísta, no tenían intensión de edificar a la Iglesia, sino tan solo buscaban una distinción humana dentro del cuerpo.
Sin embargo los dones espirituales son y deben ser para el provecho del cuerpo (1°Co 12:7), por lo tanto mayor ganancia tendrán aquellos dones que tengan que ver con la enseñanza y exhortación la cual se identifica también como el don de profecía o el don de profesar palabras de Dios para el bien de toda la iglesia.
6 Ahora pues, hermanos, si yo voy a vosotros hablando en lenguas, ¿qué os aprovechará, si no os hablare con revelación, o con ciencia, o con profecía, o con doctrina? 7 Ciertamente las cosas inanimadas que producen sonidos, como la flauta o la cítara, si no dieren distinción de voces, ¿cómo se sabrá lo que se toca con la flauta o con la cítara? 8 Y si la trompeta diere sonido incierto, ¿quién se preparará para la batalla? 9 Así también vosotros, si por la lengua no diereis palabra bien comprensible, ¿cómo se entenderá lo que decís? Porque hablaréis al aire. 10 Tantas clases de idiomas hay, seguramente, en el mundo, y ninguno de ellos carece de significado. 11 Pero si yo ignoro el valor de las palabras, seré como extranjero para el que habla, y el que habla será como extranjero para mí. 12 Así también vosotros; pues que anheláis dones espirituales, procurad abundar en ellos para edificación de la iglesia.
Aquella obsesión por hablar en lenguas al final no tenían ningún provecho para la iglesia (al parecer los pentecostales arrancaron esta hoja de sus biblias), Pablo dice; –si yo tengo que actuar como ustedes entonces mi visita será sin provecho, porque hablaría todo el tiempo en lengua desconocida y no edificaría a nadie, puede que todos queden impresionados pero sin edificación–
Debemos hacer uso de nuestra lengua, y aquí se refiera al órgano, como si fuera un instrumento de música, los cuales se usan para entonar melodías con distintas clases de notas para que se aprecien, de lo contrario daría un sonido incierto, del mismo modo la lengua está dispuesta para que nos comuniquemos por medio del correcto idioma, pero si la uso para emitir sonidos inciertos al final no voy a trasmitir ningún mensaje, seré como un pésimo músico que no sabe usar su propio instrumento musical. Este era el modo en que los corintios usaban sus propias lenguas, para dar sonidos inciertos que al final no comunicaban nada, era como una conversación de locos que desvariaban en lo que querían decir (como dos extranjeros). Estaban obsesionados por hablar otros idiomas pero ignoraban que el sentido de los idiomas es comunicar y NO impresionar.
No está mal anhelar dones espirituales, pero hay que procurar abundar en aquellos que comunican un bien para la iglesia y no aquellos que suenan como extranjeros sin sentido.
13 Por lo cual, el que habla en lengua extraña, pida en oración poder interpretarla. 14 Porque si yo oro en lengua desconocida, mi espíritu ora, pero mi entendimiento queda sin fruto. 15 ¿Qué, pues? Oraré con el espíritu, pero oraré también con el entendimiento; cantaré con el espíritu, pero cantaré también con el entendimiento. 16 Porque si bendices sólo con el espíritu, el que ocupa lugar de simple oyente, ¿cómo dirá el Amén a tu acción de gracias? pues no sabe lo que has dicho. 17 Porque tú, a la verdad, bien das gracias; pero el otro no es edificado. 18 Doy gracias a Dios que hablo en lenguas más que todos vosotros; 19 pero en la iglesia prefiero hablar cinco palabras con mi entendimiento, para enseñar también a otros, que diez mil palabras en lengua desconocida. 20 Hermanos, no seáis niños en el modo de pensar, sino sed niños en la malicia, pero maduros en el modo de pensar.
Si de verdad anhelan el genuino don de lenguas para edificar a la Iglesia, entonces pidan también a Dios el poder interpretarlas, de lo contrario tal don no tendrá ningún sentido, no significará nada. La espiritualidad no pasa por hablar cosas misteriosas mientras oro sino por la comprensión racional de lo que estoy hablando con Dios, no solo para mi mismo sino también para el hermano que está escuchando mi oración, de lo contrario no podrá decir amén a lo que estoy orando, del mismo modo la alabanza y cada actividad dentro de la Iglesia, debe ser racional.
Pablo como apóstol no ignoraba e don de lenguas, el conocía perfectamente tal don, pero no hacía uso del mismo porque no aprovechaba en nada, prefería hablar en su lengua común para edificar a todos. Buscar los dones solamente para impresionar o ser distinguidos en la congregación es una cosa de niños; –no sean infantiles, ser un cuerpo se trata del beneficio de todos, no busquen egoístamente su propio bien o su propio favor–
21 En la ley está escrito: En otras lenguas y con otros labios hablaré a este pueblo; y ni aun así me oirán, dice el Señor. 22 Así que, las lenguas son por señal, no a los creyentes, sino a los incrédulos; pero la profecía, no a los incrédulos, sino a los creyentes. 23 Si, pues, toda la iglesia se reúne en un solo lugar, y todos hablan en lenguas, y entran indoctos o incrédulos, ¿no dirán que estáis locos? 24 Pero si todos profetizan, y entra algún incrédulo o indocto, por todos es convencido, por todos es juzgado; 25 lo oculto de su corazón se hace manifiesto; y así, postrándose sobre el rostro, adorará a Dios, declarando que verdaderamente Dios está entre vosotros.
De acuerdo a la profecía de Isaías las lenguas incomprendidas eran una señal para el incrédulo, para aquellos judíos que no creía a la profecía de Isaías, de igual modo en la era de la Iglesia, las lenguas extrañas aprovecharon mas a los incrédulos tal como sucedió en Pentecostés cuando los apóstoles recibieron el Espíritu Santo, su hablar en lenguas fue una señal asombrosa que termino convirtiendo a los incrédulos del lugar, pero dentro de la iglesia en donde todos son creyentes el hablar en lenguas ya no tienen provecho. Por el contrario el don de profecía el cual incluye enseñanza y exhortación si aprovecha a los creyentes porque los edifica.
Pero si dentro de la Iglesia todos se dedican a hablar en lenguas extrañas como si fueran una Iglesia súper espiritual, al final esa clase de espiritualidad no tendrá ningún poder de persuasión ni siquiera para el hombre más común que entre a la iglesia, antes por el contrario, considerará que están todos locos y lo terminara ahuyentando; –un conjunto de personas que se reúnen para no comunicarse– , pero si el culto es dominado por la enseñanza de tal modo que todos los hermanos pueden exponer la verdad de Cristo, entonces cualquier persona que entre va a ser compungida por la palabra del evangelio y convertida a Cristo.
Un culto ordenado
26 ¿Qué hay, pues, hermanos? Cuando os reunís, cada uno de vosotros tiene salmo, tiene doctrina, tiene lengua, tiene revelación, tiene interpretación. Hágase todo para edificación. 27 Si habla alguno en lengua extraña, sea esto por dos, o a lo más tres, y por turno; y uno interprete. 28 Y si no hay intérprete, calle en la iglesia, y hable para sí mismo y para Dios. 29 Asimismo, los profetas hablen dos o tres, y los demás juzguen. 30 Y si algo le fuere revelado a otro que estuviere sentado, calle el primero. 31 Porque podéis profetizar todos uno por uno, para que todos aprendan, y todos sean exhortados. 32 Y los espíritus de los profetas están sujetos a los profetas; 33 pues Dios no es Dios de confusión, sino de paz. Como en todas las iglesias de los santos,
Es evidente que la práctica de culto de la iglesia en Corinto necesitaba ser corregida, sus cultos eran desordenados y sin provecho, se reunían solo para impresionarse unos a otros con sus dones. Pero Pablo por medio de esta carta va a regular tales conductas; lo que cada uno tenga departe de Dios sea usado ordenadamente para la edificación de la iglesia, tanto en la alabanza como en la enseñanza.
Si hay muchos que supuestamente tienen el don de lenguas y quieren expresarlo sepan que tal exposición debe ser para edificación de la Iglesia, por lo cual si no hay interprete entonces que se calle, lo mismo para los que tienen el don de profecía (en este sentido se refiere a aquella virtud de traer palabras departe de Dios para el consuelo o dirección de la iglesia en alguna situación específica), debían exponer de forma ordenada (el don no domina al hombre sino el hombre al don), pero también tales palabras debían ser evaluadas y probadas para saber si provenían de Dios; 1°Juan 4:1 Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios… El precedente de Dios por medio de las escrituras es que desde la antigüedad Dios siempre hizo todas las cosas de forma ordenada y perfecta, y a la fecha el no ha cambiado.
34 vuestras mujeres callen en las congregaciones; porque no les es permitido hablar, sino que estén sujetas, como también la ley lo dice. 35 Y si quieren aprender algo, pregunten en casa a sus maridos; porque es indecoroso que una mujer hable en la congregación. 36 ¿Acaso ha salido de vosotros la palabra de Dios, o sólo a vosotros ha llegado? 37 Si alguno se cree profeta, o espiritual, reconozca que lo que os escribo son mandamientos del Señor. 38 Más el que ignora, ignore. 39 Así que, hermanos, procurad profetizar, y no impidáis el hablar lenguas; 40 pero hágase todo decentemente y con orden.
Una cosa más que es necesario ordenar dentro de los cultos es la posición de la mujer; de ninguna manera deben ocupar el lugar de los hombres y pretender estar sobre los hombre (1Ti 2:11-15), sino deben permanecer en silencio y no interrumpir los cultos con preguntas indecorosas, sino deben preguntar en sus casas a sus esposos o bien a los ministros al final de la reunión.
Es evidente que tales restricciones no serian aceptadas por aquellos que practicaban un culto desordenado con un mal uso del don de lenguas y profecías disparatadas, por esta razón Pablo pregunta; ¿Acaso el evangelio nació en ustedes? ¿Son ustedes la iglesia modelo que impone como deben hacerse las cosas? Sepan que lo que he escrito no son sugerencias mías sino mandamientos del Señor, estoy mostrando lo que a Dios le agrada, ese es mi trabajo, pero si alguno quiere desestimar lo que digo que lo ignore…Hagan todo decentemente y en orden
La resurrección de los cristianos
En el capítulo 15 Pablo va a tratar otro asunto que tiene que ver con “La Resurrección de los muertos”, tema que estaba siendo cuestionado por algunos debido probablemente a la influencia de la filosofía mundana que estaba infiltrada en la Iglesia
1°Corintios 15:1 Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis; 2 por el cual asimismo, si retenéis la palabra que os he predicado, sois salvos, si no creísteis en vano. 3 Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras; 4 y que fue sepultado, y que resucitó al tercer día, conforme a las Escrituras; 5 y que apareció a Cefas, y después a los doce. 6 Después apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales muchos viven aún, y otros ya duermen. 7 Después apareció a Jacobo; después a todos los apóstoles; 8 y al último de todos, como a un abortivo, me apareció a mí. 9 Porque yo soy el más pequeño de los apóstoles, que no soy digno de ser llamado apóstol, porque perseguí a la iglesia de Dios. 10 Pero por la gracia de Dios soy lo que soy; y su gracia no ha sido en vano para conmigo, antes he trabajado más que todos ellos; pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo. 11 Porque o sea yo o sean ellos, así predicamos, y así habéis creído.
El mensaje del evangelio consistía en mostrar el cumplimiento de las profecías del antiguo testamento en Jesús el Cristo, profecías que anticipaban que el Ungido moriría a fin de expiar el pecado de todos, pero que sería levantado de entre los muertos y su cuerpo no vería corrupción (Sal 16:8-10), y tal acontecimiento sucedió en presencia de personas que vieron a Jesús morir en una cruz, ser puesto en un sepulcro, y pasado tres días lo vieron también resucitar de entre los muertos y luego ascender a los cielos. Tales personas fueron hechas testigos de esta verdad para proclamar la noticia en todo lugar, dieron su vida por causa de este testimonio, murieron sosteniendo esta verdad, pero aparte de estos testigos oculares que fueron sus apóstoles también Jesús resucitado apareció a más de quinientas personas las cuales también dieron testimonio que Jesús resucito, también su propio medio hermano Jacobo lo vio, y como si esto fuera poco también se me apareció a mí dice Pablo, a fin de ser participe también de la tarea apostólica de anunciar su Nombre y su resurrección a los gentiles. Tal privilegio no se me concedió por alguna virtud sino por gracia, porque soy indigno de Él, fui su enemigo, perseguí a su familia, pero su gracia fue abundantemente sobre mí, y fui enviado a anunciar y atestiguar las virtudes de Aquel que resucito de los muertos. Mi mensaje es anunciar que el Cristo vive a pesar de haber muerto.
12 Pero si se predica de Cristo que resucitó de los muertos, ¿cómo dicen algunos entre vosotros que no hay resurrección de muertos? 13 Porque si no hay resurrección de muertos, tampoco Cristo resucitó. 14 Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra predicación, vana es también vuestra fe. 15 Y somos hallados falsos testigos de Dios; porque hemos testificado de Dios que él resucitó a Cristo, al cual no resucitó, si en verdad los muertos no resucitan. 16 Porque si los muertos no resucitan, tampoco Cristo resucitó; 17 y si Cristo no resucitó, vuestra fe es vana; aún estáis en vuestros pecados. 18 Entonces también los que durmieron en Cristo perecieron. 19 Si en esta vida solamente esperamos en Cristo, somos los más dignos de conmiseración de todos los hombres.
Por medio del verso 12 está claro que los que rechazaban la resurrección eran personas dentro de la congregación, probablemente no rechazaban la resurrección de Jesús el Cristo, pero si la idea de la postrera resurrección de los cristianos. Es evidente que habían sido influenciado por la filosofía griega la cual rechazaba la idea de resurrección (Hch 17:32), Pablo va a abordar este asunto por medio de cuatro puntos;
1° Si no hay resurrección entonces Cristo no resucito,
2° Si Jesús no resucito entonces mi mensaje y mi fe no tienen sentido ni razón de ser
3° Eso significa que todos los apóstoles y evangelistas que atestiguan de la resurrección de Cristo al final estuvieron engañado a las personas con una absurda mentira, son testigos falsos en contra de Dios inventado y atribuyéndole cosas que Él no hizo.
4° Si Jesús no resucito entonces nadie venció a la muerte, lo que implica que nadie pudo expiar nuestros pecados y justificarnos por medio de una muerte sustitutiva, o sea que estamos bajo condenación para recibir toda el peso de la justicia e ira de Dios y ser puestos en el infierno.
Si la resurrección es mentira entonces todos estaban viviendo un engaño, incluso los que murieron albergando la esperanza de la resurrección al final perecieron en el infierno. Esto también implica que todos los padecimientos de Pablo por causa de esta convicción eran en vano, había desperdiciado su vida por algo que era mentira; –pobre Pablo, me da lástima, su vida casusa mucha pena–
20 Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron es hecho. 21 Porque por cuanto la muerte entró por un hombre, también por un hombre la resurrección de los muertos. 22 Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. 23 Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida. 24 Luego el fin, cuando entregue el reino al Dios y Padre, cuando haya suprimido todo dominio, toda autoridad y potencia. 25 Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies. 26 Y el postrer enemigo que será destruido es la muerte. 27 Porque todas las cosas las sujetó debajo de sus pies. Y cuando dice que todas las cosas han sido sujetadas a él, claramente se exceptúa aquel que sujetó a él todas las cosas. 28 Pero luego que todas las cosas le estén sujetas, entonces también el Hijo mismo se sujetará al que le sujetó a él todas las cosas, para que Dios sea todo en todos.
Innegablemente Cristo resucito y se cumplió en Él toda la escritura, fue el primogénito de la resurrección (Col 1:18, Ap 1:5) y si Cristo resucito entonces es un hecho que la resurrección es posible por medio de Él para todos los hombres; pero ¿de qué manera?;
Así como la muerte entro en el mundo por el pecado de un solo hombre y luego se paso a todos los hombres como una enfermedad imparable, del mismo modo también la resurrección de un solo hombre trajo al mundo la resurrección para todos los que en Él creen. Entonces en Adán todos mueren, pero en Cristo Jesús todos serán resucitados, esa es la formula celestial, por un hombre la muerte y por otro hombre la resurrección a la vida.
Pero si bien es verdad que los creyentes en Cristo Jesús siguen falleciendo y nadie hasta ahora ha resucitado sino que sus cuerpos van a parar al sepulcro, de todos modos esto no anula la esperanza de resurrección, porque el glorioso evento de la resurrección tiene un tiempo programado en el calendario de Dios, tiene un orden establecido, y sucederá de acuerdo a ese orden; el primero en resucitar para no morir más es el Cristo (esto ya sucedió), luego resucitaran todos los que fallecieron en Él, luego los que serán trasformados en el aire, luego al final de todo en el juicio ante el trono de Dios también resucitaran todos pero esta vez para juicio y condenación por causa de no haber creído.
Nada es al azar, todos los eventos escatológicos están trazados y dispensados por Dios y sucederán en su debido orden. En toda esta dispensación que Pablo presenta a grandes rasgos muestra que el Reinado y Señorío del Cristo suprimirá y erradicara toda potestad y dominio de maldad en la tierra a fin de restaurarla a su condición original. Estos pocos versos presentan un profundo trasfondo escatológico, pero no es el tema principal en cuestión (por eso Pablo no lo explica en profundidad), pero lo que es seguro es que su Reino dominara y conquistara absolutamente todo, todo estará bajo sus pies, destruirá a Satanás y arrebatara de su mano el poder de la muerte (He 2:14-15)
29 De otro modo, ¿qué harán los que se bautizan por los muertos, si en ninguna manera los muertos resucitan? ¿Por qué, pues, se bautizan por los muertos? 30 ¿Y por qué nosotros peligramos a toda hora? 31 Os aseguro, hermanos, por la gloria que de vosotros tengo en nuestro Señor Jesucristo, que cada día muero. 32 Si como hombre batallé en Efeso contra fieras, ¿qué me aprovecha? Si los muertos no resucitan, comamos y bebamos, porque mañana moriremos. 33 No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres. 34 Velad debidamente, y no pequéis; porque algunos no conocen a Dios; para vergüenza vuestra lo digo.
La expresión; “los que se bautizan por los muertos” no se refiere a que había gente que se bautizaba en nombre de personas ya muertas, tal cosa seria impropia y Pablo la hubiera corregido inmediatamente. El texto está diciendo algo así; –entonces ¿qué de aquellos que llegaron al bautismo por haber sido persuadidos por la convicción de resurrección de aquellos que ya murieron? si al final no resucitan entonces se bautizaron en vano–
Si se ponía en duda la resurrección de Cristo entonces todo el trabajo de Pablo, todo los peligros que enfrento en sus viajes y demás tribulaciones no tenían ningún sentido, si todo es mentira como se explica tanta resistencia persecución y padecimientos, y si no hay resurrección entonces disfrutemos de esta vida terrenal comiendo y bebiendo con todo tipo de placer hasta que muramos… Pero pensar así era un grave error, los que tenían tal pensamiento eran corruptos de entendimiento, sus conversaciones al final hacían daño a la iglesia.
35 Pero dirá alguno: ¿Cómo resucitarán los muertos? ¿Con qué cuerpo vendrán? 36 Necio, lo que tú siembras no se vivifica, si no muere antes. 37 Y lo que siembras no es el cuerpo que ha de salir, sino el grano desnudo, ya sea de trigo o de otro grano; 38 pero Dios le da el cuerpo como él quiso, y a cada semilla su propio cuerpo. 39 No toda carne es la misma carne, sino que una carne es la de los hombres, otra carne la de las bestias, otra la de los peces, y otra la de las aves. 40 Y hay cuerpos celestiales, y cuerpos terrenales; pero una es la gloria de los celestiales, y otra la de los terrenales. 41 Una es la gloria del sol, otra la gloria de la luna, y otra la gloria de las estrellas, pues una estrella es diferente de otra en gloria. 42 Así también es la resurrección de los muertos. Se siembra en corrupción, resucitará en incorrupción. 43 Se siembra en deshonra, resucitará en gloria; se siembra en debilidad, resucitará en poder. 44 Se siembra cuerpo animal, resucitará cuerpo espiritual. Hay cuerpo animal, y hay cuerpo espiritual.
Las preguntas propuestas en el verso 35 suponen que la resurrección desde un aspecto físico es imposible, no podría realizarse ya que el cuerpo una vez muerto se descompone, como podría restaurarse un cuerpo en descomposición por el pecado, sin embargo por medio de una analogía Pablo responde a estas cuestiones; una semilla para generar una plata tiene que morir, el cuerpo de la semilla muere, se rompe, se descompone en la tierra, pero de su cuerpo muerto y descompuesto sale otro cuerpo distinto que es el cuerpo de la planta, se planto un cuerpo que se descompuso pero salió un cuerpo vivo y diferente, este ejemplo nos muestra que para que salga un cuerpo nuevo de la semilla Dios mata al cuerpo viejo de la misma, y así sucede con todas las semillas y a su vez cada semilla tiene un cuerpo distinto una de otra. Ahora, así como hay diversidad de semillas y cada una tiene un cuerpo distinto que al final se rompe para que salga otro, del mismo dentro del ámbito de personas y animales también hay diferentes cuerpos; el hombre, las bestias, los peces y las aves, todos con diferentes carnes, del mismo modo si nos trasladamos fuera de la tierra; el sol, la luna y las estrella cada uno tiene una materia diferente y una gloria diferente.
Pero así como funciona en la semilla el nacimiento de un nuevo cuerpo, así también funciona en el hombre la resurrección de los muertos con un nuevo cuerpo, primeramente nuestro cuerpo debe morir para que se genere otro diferente que permanece para siempre.
Somos sembrados en un cuerpo que se descompone para ser levantados en cuerpo que no muere, puestos es un cuerpo débil que se envejece y se deshonra por el pecado pero levantado en cuerpo poderoso que persevera. Somos puestos en cuerpo animal (esto se refiere a terrenal) diseñado para morar en esta tierra, pero resucitaremos en un cuerpo espiritual para morar en los cielos.
En Adán y en Cristo
45 Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante. 46 Mas lo espiritual no es primero, sino lo animal; luego lo espiritual. 47 El primer hombre es de la tierra, terrenal; el segundo hombre, que es el Señor, es del cielo. 48 Cual el terrenal, tales también los terrenales; y cual el celestial, tales también los celestiales. 49 Y así como hemos traído la imagen del terrenal, traeremos también la imagen del celestial. 50 Pero esto digo, hermanos: que la carne y la sangre no pueden heredar el reino de Dios, ni la corrupción hereda la incorrupción.
Adán desde el principio de la creación recibió un cuerpo dotado solo para habitar en esta tierra y nada más, y cada uno de nosotros por medio de él heredamos el mismo cuerpo terrenal. Pero Cristo el cual es del cielo trajo un nuevo cuerpo a esta creación, un cuerpo diseñado para morar en los cielos, y cada uno de nosotros por medio de Él recibiremos el mismo cuerpo espiritual para morar en los cielos con Él, o sea; Dios creó dos tipos de cuerpo, uno natural terrenal para morar en la tierra que fue traído por medio de Adán, y otro cuerpo celestial espiritual para morar en los cielos que fue traído por medio de Jesús el Cristo.
Entonces los que solo nacen de Adán serán siempre terrenales, pero los que nacen en Cristo recibirán el cuerpo celestial en la resurrección, pero es necesario que mueran a su primer cuerpo.
Es necesario morir al cuerpo terrenal para que recibamos de Cristo el cuerpo celestial de otro modo no ingresaremos con un cuerpo terrenal al cielo, porque carne y sangre no pueden heredar el reino de Dios.
51 He aquí, os digo un misterio: No todos dormiremos; pero todos seremos transformados, 52 en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos transformados. 53 Porque es necesario que esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. 54 Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. 55 ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? 56 ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. 57 Más gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo. 58 Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.
Un misterio se refiere a algo que no estaba revelado; en este caso el misterio es que no todos los cristianos experimentaremos el fallecimiento físico, porque algunos serán arrebatados sin pasar por la muerte física, pero sus cuerpos serán trasformados para recibir un cuerpo celestial en un instante tan breve como un pestañeo.
Esto sucederá cuando el tiempo de los gentiles se cumpla, o sea el tiempo de la Iglesia, la trompeta sonara (Trompeta es orden, ¡ahora!) entonces el Señor tomara a su iglesia, y los que murieron en Él serán resucitados en cuerpo glorificado y los que estén vivos al momento del arrebatamiento serán transformados en el aire para recibir un cuerpo glorificado para poder morar en los cielos
Será un evento glorioso; Y cuando los cuerpos descompuestos sean trasformados en cuerpos incorruptibles y el cuerpo mortal de los que no fallecieron sean trasformados en cuerpo inmortales entonces una proclamación tendrá lugar en ese momento; ¡LA MUERTE QUE DEVORABA A TODOS LOS HOMBRES AHORA ES DEVORADA POR LA VIDA DE CRISTO EN LOS HOMBRES! ¡SORBIDA ES LA MUERTE EN VICTORIA! ¿Donde está oh muerte tu aguijón y donde o sepulcro tu victoria? Como un canto de escarnio contra aquel poder que tanto se mofo de nosotros ahora la vida se mofa de la muerte.
Cristo triunfo y por medio de su muerte nos justifico tomando nuestro lugar en la muerte e impartiendo su vida a favor nuestro y su cuerpo para que resucitemos a vida nueva.
La paz del Señor Jesús el Cristo.-
No hay comentarios.:
Publicar un comentario